Peñaranda de Duero

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Revisión de 11:36 8 feb 2011

Historia

Municipio localidad situados al sur de la capital burgalesa, distante 100 km de la misma, en la comarca de La Ribera de Duero, dentro del partido judicial de Aranda de Duero. Su término está atravesado por el río Arandilla, afluente del río Duero por su margen derecha. Por su territorio pasa la carretera autonómica BU-934 que la une con la provincia soriana y parte la también autonómica BU-925 que la comunica hacia el sur. Por otro lado la de la población parte una carretera local que llega hasta la N-122 (que permite el acceso de tierras sorianas a la provincia de Valladolid por Aranda) a la altura de La Vid. Históricamente su área circundante está impregnada del pasado céltico indoeuropeo y romano, y está muy cerca de Clunia. En el siglo X, su antiguo castillo constituyó un importante punto defensivo del limes del río Duero. Más adelante y a lo largo de casi toda la Edad Media, su propiedad fue de distintos señores hasta que Enrique II se la concede a Juan González de Avellaneda en la segunda mitad del siglo XIV. Ya en el siglo XV los Avellaneda comienzan a emparentar con los Zúñiga, condes de Miranda del Castañar. A partir de entonces la población entra en la órbita de esta poderosa familia aristocrática y desde el siglo XV al XVIII los condes de Miranda, que con el tiempo adquieren el título de duques de Peñaranda mandan edificar en la localidad diversas construcciones señoriales y monumentos embelleciéndola para la posteridad. Importancia primordial tuvo Francisco de Zúñiga y Avellaneda, político relevante dentro del círculo cortesano de Carlos V. Tres siglos después, a la caída del Antiguo Régimen, Peñaranda forma ayuntamiento Constitucional propio, en el partido de Aranda de Duero. En cuanto a su patrimonio arquitectónico religioso destacan las siguientes edificaciones: Ex colegiata de Santa Ana. Se trata de una construcción renacentista que inicia sus obras en 1540. Los planos del monasterio fueron realizados según la mayoría de los investigadores por Rodrigo Gil de Hontañón. Su planta es de cruz latina, una única nave crucero central y cabecera poligonal sobre la que se eleva una torre. En su interior llama la atención la cúpula del cimborrio, los blasones familiares y su retablo mayor de estilo neoclásico. Su portada principal está datada en 1732 y está realizada en estilo barroco a modo de retablo en piedra, en el que hay integrados tres procedentes de los jardines del palacio de los Avellaneda. Monasterio de las franciscanas menores. Fue mandado construir por parte de los condes de Miranda en 1528. Convento de San José del Carmen. Juan de Zúñiga y Bazán, cuarto conde de Miranda ordena el inicio de las obras a comienzos del siglo XVII. De las construcciones de carácter civil vamos a señalar las más características: Castillo. Se empieza a levantar en el siglo X como fortificación que forma parte de la defensa castellana frente a las invasiones sarracenas por parte del conde Gonzalo Fernández. Sin embargo la estructura actual data de 1460 y su realización es posible gracias a Diego de Zúñiga, primer conde de Miranda. Destaca en el patio de armas a la silueta de la torre del homenaje. Su planta es rectangular y tiene cuatro alturas. En sus muros aparecen pequeñas ventanas y está rematado por almenas y matacanes. Así mismo llama la atención el torreón circular situado en la esquina oeste del recinto amurallado. Murallas. Partían desde el castillo y rodeaban toda la población. Actualmente solo quedan dos accesos: el arco de las Monjas (por el que se entra a la calle Real) y la puerta que comunica con la plaza ducal. Plaza Mayor y rollo jurisdiccional. En el centro de la plaza se halla una bella picota de estilo gótico flamígero donde aparecen cabezas de león que se sujetan los escudos de los Zúñiga y los Avellaneda. Palacio de los Avellaneda. El encargo de su edificación corresponde a Francisco de Zúñiga y Avellaneda en el silgo XVI. Se piensa que estuvo trabajado Francisco de Colonia. En esta construcción se puede ver una mezcla de estilo plateresco, influjos renacentistas italianos y ornamentación mudéjar. En la portada exterior aparece el escudo de los Zúñiga y en el interior llama la atención el patio central con doble galería, a partir del cual se entra en las habitaciones sobre las cuales hay tallados magníficos artesonados mudéjares y renacentistas en los techos. Botica de los Ximeno. Fue fundada por Andrés Ximeno en 1685, mantiene su disposición original y sigue funcionando actualmente. Cuenta con más de 30 botes de cerámica de Talavera y tarros de vidrio con distintas medicinas. Además tiene un laboratorio y un jardín botánico. Herrería y Museo etnográfico José Cerezo. Centro de Interpretación de los Castillos.

Imágenes

Enlaces externos

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Peñaranda de Duero en Diputación